BETTE SMITH. Sábado 29 de julio

Nacida y criada en Brooklyn, hija de un director de coro de iglesia, Bette Smith cantaba el góspel que escuchaba su madre desde pequeña y la música soul que escuchaba en su barrio los calurosos veranos neoyorkinos, cuando Brooklyn era un lugar peligroso, lleno de bandas callejeras, intimidatorio para una niña en pleno crecimiento.

Cuando publicó su primer disco ‘Jettlager’, en 2017, Bette reconocetó con sus raíces en Memphis y Mississippi. Y cumplió además una promesa que hizo a su hermano Junior en su lecho de muerte, afectado por un fallo renal; que no se rendiría en su carrera como cantante. “Es todo por él”, afirma.

Bette superó de largo todas las expectativas. Aquel debut fue un disco grabado en directo, rodeados de los pantanos del Mississippi y el legado sureño del soul, pero con la agresividad y la pasión neoyorkina de Bette. 

Su continuación, tras una exitosa gira que la llevo al prestigioso festival de Montreaux, fue ‘The Good The Bad and The Bette’ (2020), un disco de soul-rock rocoso, funk, y sonidos prestados de las bandas sonoras de la Blaixplotation, producido por el bajista de Drive-By Truckers y ex-Dexateens Mike Patton, que acentúa su perfil más rockero. Con contribuciones de Patterson Hood de los propios Drive-By Truckers y Luther Dickinson (North Mississippi Allstars, Black Crowes), el disco reconfirmaba a Bette Smith como una fuerza de la naturaleza.

La han comparado con el poderío de Big Mama Thornton y Bessie Smith, la elegancia clásica de  Joe Williams, el dinamismo de Koko Taylor y la energía de Janis Joplin, todo envuelto en la magia de Billie Holiday. Música atemporal (soul, rhythm & blues) con la denominación de origen del Mississippi.